Madre mete a sus dos hijos a un horno y los quema vivos

Lamora Williams, de 24 años, metió a dos de sus hijos de dos y un año de edad al horno, luego lo encendió y los quemó vivos; medios informan que llamó a su pareja para mostrarle su crimen .

Según el diario británico “Independent”, Lamora Williams, de 24 años, quemó y mató a su hijo de dos años y a su bebé de un año en un horno; vecinos de la mujer indicaron que sufría de trastornos mentales.

Williams fue arrestada el pasado sábado y luego fue ingresada a la cárcel del condado de Fulton, sin derecho a fianza.



Jameel Penn, padre de los menores, contó que el pasado viernes por la noche recibió una videollamada de Lamora en donde le mostró a sus hijos en el suelo con quemaduras. “Están muertos”, dijo la mujer. Luego de esto, Penn llamó a la policía.

Cuando la policía llegó al domicilio de Williams, encontró los cuerpos de los dos pequeños, sin embargo, la mujer argumentó que había dejado a sus hijos con una niñera y cuando regresó ya estaban muertos.

Los menores presentaban quemaduras en su cuerpo y que posiblemente fueron realizadas con el horno. Hasta el momento, no se han dado a conocer los resultados de las autopsias de los niños.

La pareja tiene otros dos hijos, uno de tres años, que no sufrió daño alguno, pero que presenció los hechos; y otra hija de seis años que estaba con unos vecinos en el momento del crimen.

“The Atlanta Journal Constituion” informó que Lamora Williams dejó de trabajar hace aproximadamente un mes, luego de no encontrar una niñera que cuidara a sus hijos.

La nota agrega que antes de llamar a su pareja, Lamora habló con una amiga, Neesa Smith, a quien le dijo que ya no podía más con los niños. Smith comentó al diario que sugirió a Lamora hablar con la policía, pero que Williams ya no respondió.

El medio entrevistó a la hermana de Williams quien confirmó que Lamora tenía problemas de salud mental. “Ella es la única que sabe lo que pasó”, comentó.

Lamora Williams comparecerá el lunes ante el tribunal para informar sobre los hechos.