¿Qué hay en el nivel más profundo de la «Deep Web»?

Pornografía infantil, grabaciones snuff, trata de personas, lavado de dinero, transacciones ilegales y un sinfín de cosas que se esconden debajo de la superficie de ese iceberg gigante que no vemos, pero que siempre es referencia cuando se habla de la información oculta a plena luz del día.

Cuando imaginamos entrar a la deep web, creemos que se trata de una tarea sumamente complicada hecha únicamente para hackers. Sin embargo, basta con triangular tu dirección IP para que los dos primeros niveles sean accesibles. Evidentemente, lo complicado es saber a dónde dirigirte una vez que te encuentras ahí. Un universo de posibilidades sólo accesible para aquellos que sepan exactamente con quién intercambiar información, con quién quieren contactar, qué cosas desean ver o cómo hacer transacciones de la nada.

También resulta una tarea épica exponer tu seguridad ante los otros. Dispuesto a ser presa de algún depredador, dejar tus datos en lugares que desconoces o no saber a quién pertenece la dirección que triangula, te conviertes en la víctima ideal para los que no son curiosos como tú y saben exactamente cómo quedarse con tus datos personales o convertirte en el chivo expiatorio de algún crimen.

Si lo tuyo se trata de curiosidad y estás decidido a hacer lo que sea por sumergirte en ese mundo que casi nadie conoce, antes toma las precauciones correctas.

Existen cinco niveles de la Deep Web, al menos los que conocemos, puesto que otros aseguran hay otros tres de los que no hablan todavía. Cada nivel es más difícil de acceder uno del otro.

El O se refiere al Internet que todos conocemos con redes sociales como YouTube, Facebook y hasta Wikipedia. El nivel 1, aún accesible para todos, son sitios oscuros o con información cifrada. Redes sociales extrañas, las bases de datos de universidades privadas y también los host de sitios web.

Nivel 2, el último de la lista de los accesibles para todo el público. Aunque puedes encontrar cosas “under” aún son rastreadas por sitios web indexeados. Al nivel 3 debes acceder con una dirección proxy y muchos lo logran a través de sitios de hackeo. En realidad en el nivel 3 empieza la verdadera deep web. La mitad de las cosas de este nivel sólo pueden ser descifradas gracias a un Tor.

El cuarto nivel, dividido en dos partes, se caracteriza porque, aunque en la primera parte también puedes entrar con un Tor, existe tráfico de drogas, trata de personas, películas prohibidas y toda clase de mercado negro. En la segunda parte sólo puedes acceder con una modificación de hardware porque tiene un sistema de escudo que lo cierra. Pornografía infantil extrema, información de hardware experimental, información más ominosa y experimentos que nunca creeríamos verdad, casi el 80 % de la información en línea está en este nivel.

El último nivel, conocido como Marianas Web, es prácticamente desconocido pues en él se encuentran todos los documentos secretos del gobierno. Para acceder a él necesitas un programa llamado Derivación Polimérica Falcighol. Mismo que, al parecer, utilizan los gobiernos para encriptar su información.

Muchos aseguran que sólo puedes acceder a este nivel con ecuaciones diferenciales cuánticas de encriptación. Aquí te moverás entre servidores privados gubernamentales que te podrían llevar a la cárcel por evadir los poderes gubernamentales de naciones enteras.

Según la información que existe en Internet, éste es lugar donde yace la información que tienen sobre nosotros como archivos criminales, registro de dependencias secretas e información clasificada. Se dice que recibe el nombre de Marianas por la fosa con el mismo nombre conocida por ser el punto más profundo del océano. En Internet circulan diferentes leyendas sobre lo que existe en este nivel de la web. FBI, NASA, CIA y las agencias de seguridad estatales depositan su información en este sitio, pero otros aseguran que información de vida extraterrestre y archivos secretos de guerras también se encuentran aquí.

También se dice que un hacker pudo acceder a este nivel para ver información extraterrestre y por más ilógico que suene, la información se replica de foro en foro. Otros aseguran que lo hizo para infiltrarse durante un año sin ser detectado en las computadoras, archivos militares y servidores de la NASA, la marina, el departamento de defensa y el pentágono.

Conocido como Gary McKinnon o “Solo”, este hombre organizó 95 ataques cibernéticos contra el ejército norteamericano y la NASA entre 2001 y 2002. El gobierno de Estados Unidos le pidió a Reino Unido su extradición para juzgarlo por los crímenes, pero éste lo desestimó y lo dejaron en libertad.